martes, 26 de marzo de 2013

V de Vendetta - Alan Moore & David Lloyd. SIN SPOILERS



La verdad es que no se ni por dónde empezar. V de Vendetta es ese tipo de libro que marca una diferencia entre la vida que llevabas antes de haberlo leído y la vida a la que te lanza cuando lo has terminado. Ni siquiera sería hacerle justicia decir que me ha hecho ver las cosas desde una perspectiva diferente ya que, ha logrado mucho más que eso. Desde que volteé su última página, V está en mis pensamientos, se cuela en mi mente y me hace enredarme en una serie de pensamientos que me producen tristeza a la vez que satisfacción; ¿Por qué?, porque no son ni siquiera aceptados por una parte equitativa de la población. Alan Moore no es sólo un genio, sino también un gran visionario. Creo que su historia alcanza casi el nivel de mito, nacido para dar respuesta a nuestras reflexiones más trascendentes y llevar a cabo la eterna trama del bien contra el mal que tanto nos carcome por dentro en nuestra intimidad.


El primer contacto que tuve con V de vendetta fue a través de su adaptación cinematográfica, de la cual, sinceramente, no recuerdo ni un ápice. Después, este contacto se limitaba a las máscaras comerciales de V que se encuentran en muchos supermercados, sección disfraces. Yo siempre he sido una persona rarita para la lectura, tengo la peculiar manía de ser incapaz de leerme algo que no me apetece o que aún no ha suscitado en mí la curiosidad suficiente. Obviamente, leo cosas que no deseo, pero cuando lo hago, se convierten en un peculiar demonio del cual no quiero saber nada, es decir, esas lecturas están condenadas por un largo periodo de tiempo a mi desprecio, si, les cojo manía. Pero, V de Vendetta llegó a mí con una predisposición más que alta, pues con los tiempos que corren me apetecía leer algo de justicia, de valentía, de resolución. Me acordé de que V de vendetta iba de algo de “eso” y lo alquile en la Biblioteca. Un mamotreto enrome que casi requiere un atril y que venía curiosamente acompañado de una V de terciopelo roja estropeada por el uso, (he llegado a la conclusión de que no venía con el libro, sino de que ha sido elaborada por un fan de V que la ha dejado dentro del libro como regalo colectivo. Aunque no sea así, prefiero pensar esta versión de la historia, es más mágica).


Lo empecé ávidamente y casi se puede decir que lo devoré. Tanto me gusto, que tras devolverlo, me he comprado la nueva reedición en tapa blanda que se lanzaba este mismo marzo del año 2013 a un magnífico precio de unos 16,95, esnifo su olor a tinta todos los días.


La cuestión es, ¿a qué se debe tanta pasión?. Creo que en este caso, mucha gente podría otorgar una respuesta similar. ¿La mía?, me produce alivio. Si, alivio, aunque sea ficticio. Dentro del contexto histórico en el que estamos ahora, leer V de Vendetta me ha hecho sentir paz, me ha hecho no sentirme sola basándome simplemente en el pensamiento reconfortante de saber que hay alguien más ahí fuera que no tiene el cerebro comido por la sociedad, hay más personas en este mundo que piensa de otra manera a la impuesta por el orden social. Hacen falta más V de Vendettas en este mundo, en este tiempo. A pesar de que la historia nació en 1988 es completamente atemporal.


Muchas veces se ha malinterpretado el mensaje de Vendetta. La gente no entiende lo que es el anarquismo, lo asocian a la locura, el descontrol, el vandalismo, el caos…pero, él mismo lo aclara, callando las bocas de los ignorantes, en unos bocadillos rellenos de un diálogo magnifico (mi parte favorita del comic): La anarquía significa “Sin líderes” no “sin orden”. Llega el orden real, es decir, el voluntario. Y es, desde mi punto de vista, una verdad como un templo, porque no existe nada más real, honesto y verdadero que aquello que se decide emprender por voluntad propia. Es decir, un ejemplo fácil para mayor comprensión: Deberíamos NO robar porque nosotros sabemos que está mal, NO robar porque hemos tomado la determinación de hacerlo nosotros mismos. No deberíamos, sin embargo, No robar porque se ha establecido a si socialmente por un orden impuesto por otros, aquellos privilegiados a votar por los demás en una falsa “democracia” dónde gana la injusta mayoría… ¿Y si la mayoría decidiera que está bien que matemos a todos aquellos que sean rubios? ¿Es acaso democrático eso?  A esto se refiere con el orden impuesto, que no es para nada real, porque no ha sido decidido ni dilucidado por ti mismo. Nada se hará nunca con mayor fidelidad que aquello que uno ha decidido por sí mismo, ese es el orden real, el voluntario. Y para nada tiene porque asociarse a un caos.( Aquí la foto de mi propio comic):






V tiene valor, el valor de utilizar una venganza personal para transformarla en una lucha contra el conformismo. El valor de enfrentarse a todo aquello abusivo, corrupto, excesivamente tecnológico, alienante… Tiene el coraje de rebelarse y plantar una idea que despierte a la gente de su letargo. Un idea imposible de matar,ni siquiera através del paso del tiempo.


Me gustó mucho leerlo precisamente hora, cuando la gente parece idiotizada por la tecnología y las mentiras de los gobernantes. Me sentí aliviada al pensar que quizá algo de este calibre, un cambio completamente radical, podría ser posible. Me gusta pensar en V de Vendetta como un héroe incomprendido, que tomo las medias que nadie quería tomar contra cosas que estaban matando a las personas lentamente y de una forma imperceptible. Me gustan los ideales que promulga, me gusta el anarquismo, es sincero y es real. No está decidido por unos pocos, sino por uno mismo. 





V de Vendetta es una lectura completamente obligada para todo aquel que se vanaglorie de tener pensamiento crítico. Debes complementarlo con esto, con V. Yo haría de este comic lectura obligada de las escuelas. Menos clásicos para leer sobre trivialidades y más lectura de culto que te enseñen a dilucidar tus propios puntos de vista. 

PD: Esta es la V de terciopleo. ¡Sigo estando segurísima de que esto no venía con el libro de la Biblioteca! Jajaja

jueves, 14 de marzo de 2013

Cómic Lenore Collejas, por Roman Dirge. Sin Spoilers.


Os presento el peor cómic que ha llegado a mis manos hasta este momento. Creo que esta va a ser la reseña más corta que he hecho hasta ahora, ¿por qué?, porque no tengo nada que decir. Lo cogí en la biblioteca, tras dejarme engañar por el estilo Tim Burton que a tanta gente atrae irremediablemente sin ninguna razón (me incluyo). Ya lo había ojeado por encima unos segundos antes de alquilarlo  pero me tenía que ir y me arriesgué...al fin y al cabo no se debe juzgar a un libro ni por su portada ni por un vistazo rápido.
                      
No lo leaís.  No tiene ningún sentido, ninguna gracia. Es una recopilación de historietas de humor negro  que pretenden ser graciosas pero que sólo rayan el absurdo y lo cutre. La mayoría dura una hoja compuesta tan sólo de unas 5 viñetas con un dibujo que pretende ser minimalista pero que fracasa en su intento y se queda en pobre, la única que merece la pena es Lenore. Los diálogos son muy escuetos y las bromas malísimas. Sólo una me ha gustado de verdad, una, y la protagonista no era Lenore Collejas. De hecho, las mejores viñetas son causalmente aquellas en que Lenore no es la protagonista.  En otras viñetas, el autor tira la casa por la ventana y  hace las historias de 3 páginas, unas 15 viñetas, pero igual de vacías y sin sentido. En serio, a veces me pregunto cómo existiendo libros así, aún no me he decidido a terminar mi libro. A su lado, lo mío es la mejor obra del siglo 21. ¿Quién ha podido apostar por este proyecto? En serio, es aburrido, tonto y mal hecho lo mires por donde lo mires. Hay algunas historias que incluso no llego a entenderlas, las leo y las leo y no las pillo. No merece la pena que lo alquiléis  ni por la única historia que me ha hecho reír a  mí, y ya ni os hablo de comprarlo. No gastéis ni un céntimo de vuestro dinero en esto. Para mí no es más que un amago fallido de Emily The Strange en versión mediocre.
  




Artax